Perderse en Altea siempre es un plan de lo más apetecible. Y además en cualquier estación del año. Es sin duda una de las localidades alicantinas preferidas de cuantas hemos visitado desde Milocha.
Septiembre es un mes triste. Poco a poco el verano da sus últimos coletazos, se acabaron las vacaciones, empiezan las rutinas otoñales, el sol se esconde antes
En Milocha no podemos, ni debemos, guardarnos para nosotros mismos el secreto de un lugar que nos ha cautivado el corazón y los cinco sentidos. La Cala Fustera en Benissa y su Mandala Beach. Un, casi remoto, punto de la geografía alicantina que permite pasar