Volver al otoño y retomar la rutina
Septiembre es un mes triste. Poco a poco el verano da sus últimos coletazos, se acabaron las vacaciones, empezamos a retomar la rutina con la llegada del otoño, el sol se esconde antes…
Así pues, hoy me gustaría contarte por qué debes enfocar este mes como algo mágico y único (recuerda que nunca más volverás a vivir este mes en este año) así que vamos a por ello.
Sí, es cierto, anochece antes para dejar paso a una espléndida luna, si las nubes no te lo impiden. Mira la luna llena y verás como ella siempre te sonríe, así que mi pregunta es ¿si la luna puede sonreír rodeada de oscuridad y sola ante las tinieblas, no puedes hacerlo tú?
Yo creo que sí. Para ello, lo primero que debes tener en tu cara todos los días es una gran sonrisa. Ya lo comenté en un post anterior “Tú felicidad solo depende de ti”.
Aléjate del síndrome post-vacacional
Ahora es el momento de afrontar la vuelta al trabajo. Es cierto que la vuelta a la rutina puede suponer a algunas personas una depresión leve denominada síndrome post-vacacional motivada principalmente por el estrés y la tristeza de tener que afrontar de nuevo el día a día. Pero para que esto no te ocurra es importante hacer tres cosas básicas:
>>Piensa en positivo: lo malo ya vendrá solo, planifica tu trabajo poco a poco, sin agobios y poco, todo tiene su proceso y cada cosa tiene su tiempo. No intentes abarcar más de lo previsto porque de lo contrario tu estrés aumentará y empezarás el trabajo con mal pie.
>>¡Cambia de rutinas!: Si la rutina de antes no te gustaba, ha llegado el momento de hacer otras cosas. Come en sitios diferentes, ve caminando al trabajo si antes lo hacías en coche o incluso, haz algo que has hecho durante este verano como leer un libro, quedar con amigos, pasear tranquilamente.
Seguro que si planificas tu tiempo tendrás un hueco, un día a la semana que podrás destinar a hacer algo que verdaderamente te gusta. Dedica tu tiempo a hacer cosas para ti.
>>Planifica tu próxima escapada: no hay nada más placentero que pensar de nuevo en desconectar. Vienen puentes y pronto estaremos en navidades. Escoge tu próximo viaje o escapada. Planifícalo, mira posibilidades y así olvidarás tus pequeñas preocupaciones diarias.
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Y, por encima de todo, ilusiónate día a día con lo que haces. El trabajo, la familia, la sonrisa de un niño… Son regalos que diariamente nos ofrece la vida y que apenas prestamos atención. Cada día debes disfrutarlo y sobre todo… ¡Vivirlo!
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